sábado, 14 de septiembre de 2013

Gracias Dios por Beto..



Un poco despelotado y difícil de contactar, un soñador de vida intensa y dedicada, de esas personas que saben influenciar a los demás.. 

Chaqueño amante de la buena lectura, seguidor de Stott y de Galeano, admirador del arte, arquetipo de mente amplia, supo hacerse querer.. 

Con un inocente y elemental sentido del humor, un tipo pensante, perspicaz e inteligente, que sabía dar lugar a los demás y ceder poder..

Con capacidad de amar y perspectiva crítica, líder nato que vivió la aventura de tener un espíritu humilde y rebelde.. 

Fue por la vida desafiante, animando siempre a los demás a ir por más, llevó consigo el corazón abierto al dolor y la injusticia.. 

Siempre me sorprendió como tomaba los mates, rápido y de un sólo sorbo, aunque estuvieran re calientes, y me impactaba como podía transformar en un instante su rostro serio e imponente en una compradora sonrisa.. 

También recuerdo que insistía en que la celebración de la Santa Cena no era un momento triste, sino un momento feliz jeje..

De repente se nos ha ido un grande del Reino, sólo Dios sabe porque, yo sólo sé que supo dejar en nosotros su huella, y que hoy nos queda el confiar en la esperanza de la eminente realidad que versa el clásico cliché cristiano, que esto no es un “Hasta nunca” sino un “Hasta pronto”.. 

Sólo me resta decir: Gracias Dios por Beto..

3 comentarios:

  1. "podía transformar en un instante su rostro serio e imponente en una compradora sonrisa.." sin duda es la característica que mas me sorprendio de el.
    A la verdad lo vi poco para quererlo tanto.
    Gracias a Dios por Beto !!!!!

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